Fue en San Martín, donde sacaron las raíces para instalar una viga, en una obra.
Debido al peligro de derrumbe, luego la especie debió ser cortada.
Debido al peligro de derrumbe, luego la especie debió ser cortada.
San Martín de los Andes >
La Comisión de Planeamiento del Concejo Deliberante local prevé sancionar a la empresa responsable de una construcción en un lote particular, por el apeo de una araucaria de 150 años de antigüedad, considerado patrimonio de la ciudad y monumento natural de la Humanidad. Los ediles convocaron a los responsables de la obra a dar las explicaciones y ahora analizan la sanción.
El hecho ocurrió en junio pasado en la obra denominada Proyecto Sur, sita en Misionero Mascardi y General Roca, cuando los obreros cortaron algunas raíces de la araucaria para poder pasar una viga que estaba indicada en el proyecto.
Producto de estos cortes, el árbol cedió contra la edificación colindante generando un inminente peligro.
Notificados miembros del Cuerpo de Guardas Ambientales, procedieron junto a los Bomberos Voluntarios, personal de Defensa Civil y Parques Nacionales, al retiro definitivo del ejemplar de 150 años de edad, en presencia del profesional a cargo de la obra.
En su informe, el Subsecretario de Espacios Verdes de la municipalidad, José Luis Pucciarelli, indicó que ”consideramos que producto del corte de raíces del ejemplar Araucaria Araucana realizado para la implantación de la construcción, generó la inestabilidad resultando necesario su posterior apeo en vista de los graves riegos que ocasionaba.”
El apeo de esta antigua especie generó la preocupación de los ediles, quienes invitaron a la profesional a cargo de la obra, para interiorizarse sobre el hecho.
Debido a que la argumentación no resultó suficiente como para justificar el corte del mencionado ejemplar de araucaria araucana; la Comisión de Planeamiento resolvió aplicar una amonestación y solicitar un resarcimiento inmediato por el daño ambiental realizado a la comunidad de San Martín de los Andes, habida cuenta de que existe una Declaración Jurada de los responsables de la obra por la cual se compromete a preservar las especies existentes en el lote.
Además, se notificará al Colegio de Arquitectos sobre el hecho, advirtiendo que sus asociados deberán ajustarse a la normativa vigente sobre “Protección del Arbolado” y, en particular, de las especies nativas de la región.
Algo sobre las araucarias…
La araucaria o pehuén (Araucaria araucana), también llamada piñonero, pino araucaria o pino de brazos es un árbol nativo de Chile y Argentina, que hoy en día se encuentra distribuido en zonas muy restringidas de la Cordillera de los Andes y en una pequeña población de la Cordillera de la Costa chilena.
]Hoy en día esta especie está distribuida en la cordillera de los Andes principalmente en grandes extensiones del Parque Nacional Lanín en Neuquén (Argentina), entre 37º S y 40º S, y también en la Cordillera de la Costa (Chile), donde se la encuentra sólo en la Cordillera de Nahuelbuta (VIII Región).
En estado natural, se la encuentra creciendo únicamente a más de 800 metros sobre el nivel del mar, y de manera óptima en la cota de los 1.000 msnm. Se la encuentra en terrenos rocosos y arenosos con buen drenaje (por lo común de origen volcánico), en alturas donde la nieve permanece sobre el suelo durante largas temporadas y generalmente en lugares de bajas temperaturas.
Se halla asociada a bosques mixtos de lenga, ñirre y coigüe, pero en general tiene tendencia a formar bosques puros.
Debido a su lento crecimiento se han observado araucarias que han alcanzado hasta 1.000 años de edad.
Es un árbol perenne, de hasta 50 m de altura, con tronco recto, cilíndrico, a veces muy grueso (3 o más metros). La ramificación comienza a varios metros del suelo; en los ejemplares más viejos, se dispone en verticilos de 5 ramas que se extienden perpendiculares al tronco; estas ramas son flexibles y tienen hojas agrupadas hacia los extremos.
Sus hojas son de extrema dureza y están provistas de un mucrón (espina) en la punta, de color verde oscuro. Las hojas son de 3 a 4 cm de largo y están dispuestas de manera imbricada sobre la ramilla, donde permanecen durante varios años.
Existen plantas masculinas y femeninas, con diferencias morfológicas en las placas que forman la corteza y en las flores, siendo mucho más vistosas las femeninas.
En América se encuentran en la Patagonia en Chile y Argentina, y en la selva tropical de Argentina y el Brasil meridional. En Oceanía en Nueva Caledonia (donde son endémicas 13 especies), la isla de Norfolk, Australia del este y Nueva Guinea. Muchas, si no todas las poblaciones actuales son relictas.
Se encuentran en bosque y estepa, con una afinidad para los sitios expuestos. Estos árboles columnados son fósiles vivientes, de la edad Mesozoica. Los expedientes fósiles demuestran que el género también estuvo antes en el hemisferio norte hasta el final del período Cretáceo.
El nombre del género deriva de la región de Arauco, donde los indígenas mapuches de Chile central y del sudoeste la Argentina lo utilizan como alimento, y le dan el nombre de pehuén. Estos nativos, que incluso se llaman a si mismos Pehuenches ("gente del Pehuén"), cosechan las semillas extensivamente para el alimento. Muchos erróneamente lo llaman "pino", a pesar de que su relación con los pinos (Pinus) es muy lejana.
Son principalmente árboles grandes con un vástago erguido masivo, alcanzando una altura de 30-80 m. Las ramas horizontales, que se separan y se cubren con las hojas coriáceas o aciculares.
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