Causas de la ceguera

La gran mayoría se debe a las cataratas, que son operables; en la Argentina haría falta realizar 30.000 cirugías más por año

Por Nora Bär De la Redacción de LA NACION

Unos 80.000 argentinos están ciegos por un trastorno que puede resolverse con una cirugía mínimamente invasiva y muy efectiva en relación con su costo. Las cataratas -que vuelven opaco el cristalino, que es la lente del ojo- son la primera causa de ceguera evitable en el mundo. Pero hay otras: los errores refractivos sin tratamiento (no disponer de un par de anteojos adecuados), el tracoma (infección que causa úlceras oculares), el glaucoma (deterioro del nervio óptico por la alta presión ocular), la retinopatía diabética (causada por el daño en los vasos sanguíneos que irrigan la retina), la ceguera de río (u oncocercosis, una enfermedad trasmitida por mosquitos que causa lesiones en los ojos)... En el mundo hay aproximadamente 314 millones de personas ciegas o con baja visión grave. "No ven ni siquiera la "E" grandota que figura en la parte superior de la cartilla del oftalmólogo -explica el doctor Van Lansingh, coordinador regional de Vision 2020: El Derecho a la Visión, iniciativa conjunta de la Organización Mundial de la Salud y la IAPB que tiene como meta eliminar la ceguera evitable en todo el mundo para el año 2020-. De ellas, algo menos de la mitad podrían ver sencillamente con acceder a un par de anteojos." Hace menos de una década, la lucha contra la ceguera evitable casi no figuraba en la agenda de los organismos de salud pública. "Esta iniciativa empezó en todo el mundo en 1999", cuenta el doctor Hugo Nano, copresidente de la IAPB en América latina. Y agrega la licenciada María Eugenia Nano, miembro de la misma asociación: "Sin embargo, 18 de los 19 países de la región estarán presentes en esta asamblea, y 13 de ellos tienen un plan nacional. En la Argentina, en todas las provincias hay oftalmólogos que están haciendo algún programa de prevención. El lunes, tres ministros de Salud estarán en la ceremonia de apertura. Es un gran cambio". "Desde el punto de vista de la inversión, si se reduce la ceguera, en cinco años podrían liberarse cantidades significativas de dinero que podrían utilizarse en otras prioridades, no sólo porque esas personas ya no serán ciegos, sino porque ellos y sus cuidadores volverán a ser productivos -dice Lansingh-. Son dos personas que vuelven a trabajar, pagan sus impuestos...

De modo que el nuestro es un objetivo no de largo, sino de mediano plazo. Sólo les pedimos a los gobiernos cinco años de atención." Según las estimaciones de la Organización Mundial de la Salud, una cirugía de cataratas cuesta dos sueldos. En el país, se hacen 2277 operaciones por millón de habitantes, por año, pero se calcula que tenemos 3000 casos nuevos por millón de habitantes, por año. Por otra parte, esos números ocultan una gran iniquidad: mientras en el Gran Buenos Aires la misma tasa roza las 4000 cirugías por millón de habitantes por año, en algunas regiones del país baja a 1700. "En el Impenetrable -acota Lansingh-, apenas llega a 300. Es decir; hay 2700 cirugías por millón de habitantes, por año, que no se hacen... El oftalmólogo promedio de la Argentina opera menos de 39 cirugías por año. Eso significa que son tres por mes. Si cada uno aumentara un 20% su producción en cinco años, literalmente no habría ciegos por falta de cirugía de cataratas."

Los anteojos en la escuelaEntre el 6 y el 8% de los chicos que van al colegio tienen un error refractivo sin corregir, pero no lo saben. "Aunque parezca mentira, los escolares no ven bien porque les faltan anteojos", lamenta el doctor Hugo Nano. La cifra surge de un estudio que realizó la Fundación que lleva su nombre entre más de 400.000 chicos de la provincia de Buenos Aires, una investigación que mereció el premio de la Academia Nacional de Medicina. Los especialistas distribuyeron a los docentes una cartilla muy sencilla para medir la agudeza visual, preparada para que no se pasara por alto ningún chico con defectos refractivos. "En esa prueba, alrededor del 20% cometían errores -cuenta su hija, María Eugenia, vicepresidenta de la Fundación-. Es a esos chicos a los que posteriormente se les hizo el examen visual, previo pedido de autorización a los padres." Los oftalmólogos de la Fundación Nano los examinaron con todo el equipo necesario y les hicieron una historia clínica. Detectado el problema, también se ocuparon de resolverlo: en diez años, entregaron alrededor de 20.000 anteojos. "Las necesidades son tantas, que a veces algo tan simple es muy difícil de conseguir en un hospital", reflexiona María Eugenia.

La causa del psicólogoLa jueza María Fontbona de Pombo debe resolver un pedido de nulidad de las declaraciones que realizó el menor de 13 años que denunció haber sido violado por el psicólogo Jorge Corsi. El argumento que utilizó su abogado defensor Roberto Casco es el mismo que se esgrimió tras el juicio oral en el que se anuló una condena a un violador: que no pudo controlar ese interrogatorio (sobre lo que se informa por separado). El fiscal Niklison dictaminó en contra de la pretensión del abogado al sostener que el interrogatorio había sido exhaustivo y que estaba grabado en video, por lo que se podría reproducir sin necesidad de volver a exponer nuevamente al chico. Casco entendió que el fallo de la Cámara de Casación que determinó anular la condena a un violador puede ser un precedente válido en el caso Corsi. "Podría ser viable la aplicación de este fallo, si bien una resolución de la Cámara de Casación no obliga a los jueces de instancias menores; [sólo] tiene un valor de referencia", dijo el letrado. Destacó que ellos también reclaman no haber podido controlar la declaración del adolescente que acusa a Corsi y a otros tres procesados con prisión preventiva, conocidos del psicólogo y también acusados de haber abusado del muchacho. En este caso, dijo, en el momento de la declaración de la víctima su cliente ya estaba identificado en la causa, por lo que -según su opinión- debería haber sido notificado del caso para que pudiera defenderse y proponer sus peritos de parte. Pero tanto el fiscal como la jueza no creen que haya debido ser así. Tanto es así, que cuando Corsi ya estaba detenido y se presentaron a declarar en la Cámara Gesell otros menores que dijeron haber conocido a los acusados, la defensa del psicólogo pidió participar de esos interrogatorios, pero esa solicitud les fue denegada.